Durante los días 18 y 19 de noviembre se realizó el seminario “Políticas Públicas para Garantizar el Acceso al Agua: Desalación y Reúso, soluciones para Chile”, organizado por la Asociación Latinoamericana de Desalación y Reúso de Agua (Aladyr).

Joaquín Villarino, Presidente Ejecutivo del Consejo Minero, fue invitado a participar de un panel de conversación junto a Marta Colet, Gerenta General de Aguas Andinas; moderado por el periodista Matías del Río.

En la instancia, Villarino señaló que, en el contexto de incertidumbre que vivimos en cuanto a la futura disponibilidad de los recursos hídricos -debido a los posibles efectos del cambio climático, a regulaciones ambientales cada vez más exigentes y a una fuerte presión social- el suministro y la gestión de los recursos hídricos se ha vuelto un tema aún más prioritario para el sector minero.

El Presidente Ejecutivo del Consejo Minero expuso algunas cifras de uso eficiente del agua en minería. Destacó que la gran minería consume sólo un 3% del agua continental del país; y que solo en la Región de Antofagasta es un usuario relevante, con un 50% del consumo regional. En Tarapacá es 17%, Atacama 12% y en las demás no sobrepasa el 2%.

También dio cuenta de que el 74% de agua que consume la minería es recirculada, es decir, solo un 26% es agua nueva. Para disminuir aún más el consumo de agua, especialmente en zonas donde se ubica la industria, la gran minería ha incorporado nuevas tecnologías que permiten utilizar agua de mar en sus procesos. Así, actualmente existen 14 plantas que están asociadas a operaciones mineras -10 de ellas se ubican en Antofagasta, atendiendo el consumo de agua de la minería en la región- y 13 potenciales proyectos en carpeta.

Agua desalada y buenas prácticas

Durante su exposición, Joaquín Villarino mostró algunos ejemplos de buenas prácticas de las empresas socias del Consejo Minero en el uso de agua desalada. Presentó el caso de Caserones, que desde el año 2015 entrega 50 l/s de agua desalada potabilizable a los servicios sanitarios de la comuna de Caldera, además de 100 l/s de agua desalada apta para riego en el canal Mal Paso, en la comuna de Tierra Amarilla.

Asimismo, Minera Candelaria ha logrado minimizar el impacto sobre la cuenca de Copiapó gracias a la planta desalinizadora inaugurada en 2013, con la que ha podido abastecerse prácticamente en un 100% de esta fuente. Joaquín Villarino también destacó la estrategia hídrica de BHP (Minera Escondida) que desde enero de 2020 solo consume agua desalada.

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