Una manera de incorporar la circularidad al ámbito estratégico.

En 2022 terminó el despliegue en toda la organización del proyecto de eliminación de botellas plásticas. Se llevó a cabo un proceso intensivo de gestión del cambio que incluyó campañas de concientización sobre la importancia de aplicar los principios de la economía circular en las actividades diarias, además de la divulgación de los espacios habilitados para recargar las nuevas botellas “UMA”. Además, se instalaron 248 dispensadores de agua purificada en los campamentos, casinos y áreas operacionales y se entregaron más de 20.000 botellas metálicas a todos los trabajadores.

Gracias a esto, se proyecta una reducción anual de 3,2 millones de botellas desechables, el equivalente a unas 36 toneladas de residuos plásticos. También significa el ahorro de USD 3,6 millones en la compra de agua embotellada.