En entrevista con el Líbero, el Presidente Ejecutivo del CM, Joaquín Villarino, se refirió  a la situación actual y a los desafíos que enfrenta la industria minera producto de la pandemia que afecta al país.

Respecto a las solicitudes que han realizados diferentes dirigentes de Antofagasta y Calama para paralizar actividades de la zona como la minería, el dirigente gremial afirmó que: “Si la autoridad sanitaria determina que hay que tomar medidas de este tipo, el sector no se va a oponer bajo ningún concepto, siempre y cuando las decisiones se tomen bajo los fundamentos correspondientes”.

Sin embargo, el Presidente Ejecutivo del CM desestimó las acusaciones que aseguran que han sido las faenas mineras las responsables de aumentar el número de casos positivos de coronavirus. “No nos parece sensato culpar a la industria minera del alza de contagios cuando el número de casos dentro de ésta es bajo en comparación al nacional”, señaló.

En cuanto a la situación actual de algunos proyectos mineros que se han visto afectados por los efectos del COVID-19, Villarino dijo que: “Como una forma más de garantizar la seguridad y salud de sus trabajadores, ciertas empresas han tomado la decisión de suspender la construcción de algunos de sus proyectos. Dentro de las obras que se han visto afectadas, y que involucran a las empresas socias del Consejo Minero, se encuentran: Nuevo Nivel Mina de División El Teniente; Chuquicamata Subterránea y otros proyectos divisionales de Codelco; Quebrada Blanca II, Teck; y Proyecto INCO, AMSA. Existen otros proyectos, como Spence Growth Option de BHP, que no han paralizado su construcción, pero que han presentado retrasos por la menor dotación presencial, medida adoptada para prevenir los posibles contagios por Covid-19. Hay que considerar que la construcción de proyectos de gran envergadura requiere de muchas personas. Solo por dar un ejemplo, para el proyecto de Teck QB2 se requerían 15.000 trabajadores. Con ese nivel de gente y con una pandemia como esta, se hace imposible tener a tantas personas juntas trabajando en un solo lugar. Por lo tanto, la decisión de reactivar estos proyectos dependerá de cada compañía, quienes deberán evaluar que las condiciones de higiene y seguridad sean las óptimas, antes de reactivar cualquier proyecto. En esto debemos ser bien exigentes, muy responsables y cuidadosos”.

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