El cobre desempeña un papel crucial en el suministro de energía eólica dado que posee cualidades destacables, como la alta conductividad, la baja resistencia eléctrica y una buena resistencia a la corrosión. Algunos parques eólicos llegan a emplear hasta 91.500 metros (o hasta 300.000 pies) de hilos de cobre. La electricidad generada a través de la energía eólica es conducida por los cables de cobre aislados hacia un transformador revestido también de cobre. El cobre permite construir una plataforma de energía más sostenible, importante para el desarrollo económico y el desarrollo social. Constituye un componente esencial de productos y sistemas eléctricos, desde hilos, cables y motores hasta generadores, transformadores y equipos de protección. El cobre ofrece una mejor conductividad eléctrica que otros metales comerciales, por lo que constituye el material ideal para la generación, distribución y uso de energía eficiente. Por ejemplo, el cobre es 65% más conductivo que el aluminio.

Fuente: Exsasoluciones